MERCEDES PÉREZ SAN MARTÍN

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PIN UPS

de David Bowie

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AUDIO DE TEXTO

La "British Invasion'' fue un movimiento musical que resultó un verdadero suceso en Estados Unidos a mediados de los años 60 's, cuando grupos de rock procedentes del Reino Unido alcanzaron una gran popularidad, acarreados por el descomunal éxito que ya tenían The Beatles. Todos estos grupos, paradójicamente influenciados por el rock and roll, el blues y el rhythm & blues estadounidenses, eran capaces de elaborar canciones sencillas y pegadizas, que terminarían por enamorar a la audiencia americana.

The Rolling Stones y The Animals fueron los primeros en invadir musicalmente a los Estados Unidos, aprovechando el fértil terreno que encontraron. Los primeros representando la cara agresiva del rock inglés, con su actitud de chicos malos, contrastando en cierta forma con la pulcra y educada imagen que daba The Beatles. Mientras que The Animals, con su adaptación de la canción folk popular “House of the Rising Sun”, lograron conseguir el número uno en las listas estadounidenses y a finales de 1964 pudieron editar su primer LP, "The Animals".

Sin el impacto que tuvieron las anteriores y a pesar de no alcanzar la misma popularidad, hay que destacar a bandas como The Who, Them, The Yardbirds y The Kinks que, a pesar de su escasa presencia durante el momento culmine de la British Invasion, su influencia fue superlativa entre las nuevas bandas que surgieron por todas partes de la geografía estadounidense y que dieron lugar al posterior nacimiento del Garage Rock.

En abril de 1973 David Bowie había lanzado el provocador “Aladdin Sane” que se convertiría en su álbum más exitoso a nivel comercial hasta esa fecha. RCA Records, su compañía discográfica, aprovechando esta situación, le exigió que grabe un nuevo disco, amparándose en una cláusula del contrato que tenían firmado en donde el artista debía entregar una cierta cantidad de producciones en un par de años. Por ese entonces, Bowie aún les debía uno.

Totalmente cansado luego de llevar dos años tocando en vivo sin parar, incluso componiendo y grabando en medio de la gira, se dio cuenta que crear un álbum de cero no era una posibilidad lógica. Fue así como tomó un grupo de canciones de varios de sus artistas ingleses favoritos, esos que iba a ver religiosamente al Ricky-Tick en Londres a finales de los 60 's, y lanzó un disco con versiones de estas, dirigido especialmente al mercado norteamericano.

Grabado en los estudios Château d'Hérouville, en Francia, "Pin Ups", sorprende desde su portada, donde aparece una imagen de Bowie junto a la supermodelo británica Twiggy. La foto, en un principio iba a ser portada de la revista Vogue pero, finalmente, terminó en la tapa del disco, por pedido expreso del músico.

Desde el comienzo, con la acelerada versión que hace de "Rosalyn" de The Pretty Things, pasando por "Here Comes The Night" de Them, hasta "I Wish You Would Do" de The Yardbirds, el disco derrocha energía y desparpajo, al punto de dejarnos sin aliento.

Cuando llegamos a "See Emily Play", clásico absoluto de la mejor época del Pink Floyd de Syd Barret, Bowie nos sorprende con una versión mucho más dura y machacante, pero aun así respetando los pasajes característicos que identifican a esta genial obra psicodélica.

La transformación absoluta que hace de la versión original de "I Can't Explain" de The Who, desde ese arranque con sus guitarras distorsionadas, sumando al saxo en varios pasajes y rematando con la lasciva y candente forma en que la canta, la vuelven el punto más alto del álbum.

"Sorrow", original de The Merseybeats y que fuera el primer corte del disco, es el tema que suena más relajado y Bowie de todo el álbum. Es donde lo vemos dejarse fluir y ser él, mientras la melodía nos acompaña y nos ayuda a bajar un cambio para prepararnos a lo que resta por escuchar.

Para cerrar aparecen tres bombas seguidas, como son "Shapes of Things" de The Yardbirds, "Anyway, Anyhow, Anywhere" de The Who y el cierre con "Where Have All the Good Times Gone" de The Kinks. Puestas en forma caprichosa, como queriendo ajusticiar a los relegados de la primera Invasión Británica, respetando sus versiones originales, pero llenandolas de guiños Bowie, para dejar claro quién está detrás de esta obra.

Este trabajo, que es casualmente su última grabación con "The Spiders From Mars", su banda a lo largo de su etapa de Ziggy Stardust, no sólo ayudó a reivindicar y posicionar en el mercado norteamericano a sus bandas favoritas, sino que lo terminó de consolidar a David Bowie como el artista vanguardista e inmortal que todos amamos.

En memoria de I.L.

Saludos.

Juli